El día 7 de mayo tuvo lugar en la Asociación Valle-Inclán una jornada de puertas abiertas.
Ya en la nueva sede, en la Calle Cardenal Silíceo 23, la Asociación quiso ofrecer al barrio un día abierto a la información y al intercambio.
La jornada dio lugar a tener entre los asistentes contrastes de opiniones y pareceres, a la vez que se les facilitaba información sobre los objetivos de la Asociación y las actividades que se realizan habitualmente, así como otras más puntuales o extraordinarias.
Fueron muchas las personas que entraron en el local a lo largo del día y con distintas inquietudes. Un hermoso retrato de Valle-Inclán, como ilustre portero, iba dando la bienvenida a la llegada. A su lado la biblioteca atraía la atención de los visitantes, interesándose por el préstamo de libros.
Un relajado café con pastas o un vino, según la hora, rompía el recorrido hacia los talleres y la pregunta ¿qué hay que hacer para hacerse socio? era la más frecuente.
Parejas con niños pequeños, chicas-os, señoras y señores anduvieron por las distintas estancias mostrando sincero interés por lo que allí se hacía, dando a su vez un aire vivo al local del que se resaltaba su amplitud, fácil acceso y luminosidad, así como la buena acogida que se les daba. Algunas personas que asistieron a dichas jornadas ya conocían la Asociación, y el proceso que ésta había llevado con motivo del desalojo del anterior local por la Comunidad de Madrid. Habían apoyado a la Aso en todo momento y querían seguir haciéndolo en la nueva situación.
También sorprendió mucho a los vecinos el saber que hay un desayuno vecinal-intercultural, todos los martes a las 10,30 horas, en el que se comparte en torno a un café las noticias de actualidad, en un diálogo abierto y libre.
La Asociación agradece a todas las personas su visita y compañía.