Madrid, ciudad abierta a todo el mundo, ha estado engalanada durante varios días con la bandera arcoiris y sus calles llenas de personas de diferentes países, y de distintas orientaciones sexuales, que en un ambiente de libertad y alegría han celebrado el Día Mundial del Orgullo LGTBI.
Cientos de actividades se han sucedido en siete escenarios diferentes, fiestas, actos culturales, debates como la Conferencia Internacional de Derechos Humanos en la Universidad Autónoma. Todo ello bajo el lema “Viva la Vida”.
El pregón de apertura tuvo lugar en la plaza Pedro Zerolo y contó entre otros con la presencia de Alejandro Amenábar y Cayetana Guillén Cuervo
El eje central, fue la gran manifestación del 1 de julio que transcurrió desde la Glorieta de Atocha hasta la Plaza de Colón. En la pancarta de cabecera se podía leer: “Por los derechos de LGTBI de todo el mundo”. Los convocantes fueron la Federación Estatal de gays y lesbianas LGTBI y el colectivo de Madrid COGAM con el respaldo de organizaciones sociales, sindicatos y partidos políticos.
La marcha fue festiva y lúdica y los objetivos políticos y reivindicativos: que todos los países legislen hasta alcanzar la plena igualdad entre personas LGTBI y el resto de la sociedad.
Participaron numerosos representantes de países como Austria, Canadá, Estados Unidos, Suiza, Italia, entre otros.
Hoy día hay países que castigan la homosexualidad fundamentalmente en Asia y África incluso con pena de muerte. En España han pasado 40 años desde la primera manifestación por los derechos de los homosexuales celebrada en 1977 en Barcelona y 25 desde la fundación de la Federación Estatal de lesbianas gays transexuales y bisexuales.
Al finalizar, ya en Colón, se leyó un manifiesto por diversos activistas, muchos de ellos históricos que han realizado un largo recorrido y duro trabajo junto a muchas personas para poner a nuestro país en el Centro Mundial de los derechos LGTBI. Intervino la Presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes y la Alcaldesa de Madrid, que en su discurso agradeció a las madrileñas y madrileños los cien mil lazos que habían puesto en el Ayuntamiento formando la bandera arcoiris, bandera de todos. Dijo que los “ derechos son aquellos que dan vida” y si se tuercen “ hay que cambiarlos” y terminó con un homenaje al poeta Federico García Lorca leyendo unos versos de su libro de poemas “Los amores oscuros”, que no se acabe nunca la madeja del te quiero me quieres, y finalizó con “améis a quien améis” Madrid os quiere.
En el escenario, por primera vez, todos los representantes de los partidos políticos sin exclusión bailaron formando una gran cadena.
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