¿Qué significa amor a la humanidad? ¿A toda la humanidad?
Para Manuel Fraijó, teólogo y filósofo, decano de Filosofía de la UNED, es un tipo de amor diferente al que profesamos a padres, amigos, pareja… no es un amor pasional, afectivo. Es otra cosa, es tener en cuenta a la humanidad. Somos seres humanos y se nos exige un trato humano, de preocupación, cuidado, alivio y sensibilidad ante el sufrimiento, de respeto a la humanidad, de respeto a nosotros mismos.
Con una disertación sobre el amor a la humanidad finalizó Manuel Fraijó el ciclo "Encuentros con la filosofía: formas de amar" que ha tenido lugar en la Fundación Mapfre.
Después de repasar las distintas categorías religiosas y filosóficas más relevantes a lo largo de la historia deteniéndose en Sócrates y Jesús, llegó a la tensión entre lo particular y lo universal que se encuentra en todos los ámbitos de la vida, remarcando el legado de los Ilustrados, de emancipación y hermanamiento de todos los seres humanos.
Habló de los valiosos ideales de la Modernidad que sin haber llegado a ensayarlos realmente se están arrumbando en la Posmodernidad.
De las culturas con su sentimiento de pertenencia que son traspasadas por lo humano transcultural, por la civilización, y ahí es donde la ética y la religión se aproximan, en la compasión como fundamento último de la moral y en lo mucho que nos parecemos todos los seres humanos. Y como condición necesaria de ese amor a la humanidad: repartir.
Manuel Fraijó terminó con una rotunda afirmación de la que deberíamos ser muy conscientes hoy en día "el mayor problema filosófico es el hambre".