Acaba de comenzar la campaña electoral que determinará la composición política de nuestra Comunidad y nuestro Ayuntamiento y los distintos grupos políticos se han lanzado a pedir nuestros votos. Para muchos ciudadanos las campañas electorales poco aportan, porque su decisión está ya tomada en virtud de afinidades políticas o de como ha ido conformando su criterio a lo largo de los pasados cuatro años. Para otros muchos en cambio, es el momento de valorar, a través de los distintos programas electorales, quien se acerca más a sus ideas de cómo mejorar la vida ciudadana. Y al tiempo que hacemos balance miramos hacia el futuro.

Es el momento de analizar como se han comportado quienes administran los recursos de los ciudadanos. Es el momento de mirar a nuestro barrio y pensar que ha cambiado en estos cuatro años. Y de estudiar si nuestra sanidad, la educación de nuestros hijos, la atención a nuestros mayores, el estado de nuestro entorno ambiental, el costo y la eficiencia del transporte público, el acceso a la cultura o la salud democrática de las instituciones, ha mejorado o está todavía lejos de nuestros deseos y necesidades.

Y también es el tiempo de pedir responsabilidades a quienes las tienen. Es el instante en el que hay que recordar que estas son elecciones municipales o autonómicas y que ya habrá tiempo para hablar de unas generales. Los primeros mensajes del partido que gobierna Ayuntamiento y Comunidad, quiere convencernos de que el objetivo de estas votaciones es el palacio de la Moncloa, pero para los millones de ciudadanos de Madrid y de su Comunidad, el objetivo es convertir a sus municipios en un lugar mejor y más solidario. Para lo demás ya llegará su tiempo. Ahora es cuando debemos saber si las tramas para que el dinero público llegue a bolsillos privados y se reparta entre responsables políticos, va a ser juzgada por la ciudadanía o de comprobar que opinión tienen los habitantes de la ciudad de Madrid sobre las inversiones millonarias en nuevas sedes municipales y las notorias deficiencias en equipamientos en los distintos barrios y distritos de lo que no es el cogollo central de la ciudad.

La Fravm (Federación  Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid) ha publicado un detallado e interesante documento sobre las necesidades y peticiones de los distintos barrios de Madrid, que puede consultarse en su pagina web (aavvmadrid.org) y que resume perfectamente el sentir de miles de ciudadanos madrileños sobre lo que necesita nuestra ciudad.

En “Prospereando” creemos que es el momento de exigir, cada uno con su voto, que las promesas electorales no se queden en meras proclamas vacías; que los que administran nuestras instituciones sean responsables ante los electores y no ante quienes les han puesto en las listas, que las organizaciones políticas busquen ensanchar los canales democráticos y no meramente ampliar sus cuotas de poder, que se dediquen a solucionar los problemas realmente existentes y no a generar eslóganes vacíos y demagógicos. La libertad de voto es esencial, pero no lo es menos la información libre y el espíritu crítico que darán “sentido” a ese voto.

Para la Asociación de Vecinos “Valle Inclán”, además de todas las consideraciones anteriores, hay un aspecto esencial para su propia existencia, que también tiene relación con estas elecciones: la amenaza de expulsión del local que hoy ocupa sigue en pie, a través de la acción emprendida por la Comunidad de Madrid. Por eso nos gustaría que todos los vecinos de este barrio tomaran conciencia de la pérdida de calidad democrática y de participación ciudadana que entrañaría que este desalojo tuviera finalmente lugar.

Es tiempo de promesas, pero también de exigencia y de compromiso ciudadano, porque sin nuestra acción, quienes deciden tendrán siempre la tentación de hacerlo sobre nuestras espaldas.