La fiesta de fin de curso de la Asociación de Vecinos Valle-Inclán Prosperidad, ha dado mucho juego este año.

Los vecinos y vecinas de Prosperidad que han acudido a la celebración han podido, a la vez, hacer compras en el Rastrillo Solidario y aportar algún alimento a la Operación Kilo con la que se ayuda a cubrir las necesidades básicas de nutrición de personas necesitadas.

Un poco de vintage e interculturalidad en adornos, ropa o bisutería. Una dosis de altruismo para dar y recibir y un ejercicio de simbolismo y realidad en las actuaciones de Danza oriental, Taichi y Teatrillo de actualidad política, han humanizado las relaciones individualistas y estresantes que la actual sociedad impone.

No hace falta ser socio de la Asociación, todos y todas los que se sientan solidarios pueden aportar su ayuda en: Cardenal Silíceo nº 23.