El 20 de julio ha tenido lugar una concentración frente al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que ha dado cuerpo a la vigésimo primera Marea Blanca madrileña.
Convocados por la Mesa de la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, se encontraba en el Paseo del Prado una nutrida representación de trabajadores sanitarios, junto a usuarios y ciudadanos de diversos colectivos, que rodeaban a una gran pancarta colocada en el suelo del Paseo en la que se leía: NO A LOS RECORTES, SÍ A LA SANIDAD Y A LOS SERVICIOS PÚBLICOS.
Se acababa de producir la jubilación forzosa del Dr. Marciano Sánchez-Bayle, Presidente de la Federación de Asociaciones por la Defensa de la Sanidad Pública y luchador infatigable durante años por la Sanidad Pública. Previo a esta medida se había producido el cese, por parte del gobierno de la CAM, de cuatro directores de Centros de Atención Primaria: General Ricardos, Las Águilas, Legazpi y Nuestra Señora de Fátima, que habían destacado como líderes y portavoces en las sucesivas Mareas Blancas.
En el ambiente reivindicativo de la concentración destacaban pequeñas pancartas con lemas como: “Sin formación no hay desarrollo, sin sanidad todos al hoyo”, “Derivar es privatizar y también las vamos a parar”, “Ninguna ley privatizadora de la sanidad”, “Apartheid sanitario, NO”, “Recortar Sanidad, corrupción mortal”, “La Mato nos mata y este gobierno nos remata”, “Sanidad universal de y para todos”, “Más contrataciones y menos derivaciones”. Se coreaban letrillas y slóganes: “Sanidad universal, ningún paciente es ilegal”, “A los que privatizan nuestra sanidad, debemos mandarles a Soto del Real”.
La orquesta Solfónica del 15M amenizó a los presentes con sus interpretaciones de ingenioso y satírico contenido sanitario.
La lectura compartida de un Manifiesto dio fin al acto, destacando los aspectos más significativos del momento, como: los Centros de Salud Mental y su abandono, cambio de modelo. Transformación del Hospital Carlos III de infecciosas, la deficiente limpieza hospitalaría, las derivaciones de pacientes y pruebas diagnósticas a Clínicas privadas, el cierre de camas hospitalarias y las obras estructurales, preparando las Unidades de Gestión Clínica.
Se señaló también, la no coincidencia entre lo dicho por el nuevo Consejero de Sanidad Javier Rodríguez, de que traía al cargo el deseo de diálogo y colaboración, con los hechos que se están sucediendo, respecto a las medidas represivas hacía a algunos profesionales y acciones consumadas como el cierre del Centro de Trasfusiones.
No obstante, la lucha continúa y la nueva cita será en septiembre.