Una nueva jornada de compartir saberes, en la Asociación Valle Inclán –
Prosperidad, en este caso sobre “Organización y ordenación de espacios
interiores”, impartida por Ángeles Alcolea, muy conocida en nuestra ASO y
socia colaboradora de la Asociación Cultural "El Sol de la Conce".
Ángeles nos expuso algunas de sus ideas para cambiar la relación que tenemos con las cosas que acumulamos en casa y aprender a deshacernos de ellas, para que puedan seguir cumpliendo su función en otro sitio.
También nos mostró algunas líneas generales del método Konmari, de la japonesa Marie Kondo, para ordenar por categorías.
Esta filosofía del orden es una actitud ante la vida, ya que nos aporta muchos efectos positivos que podemos sentir en el bienestar diario.
Algunas cosas que debemos tener en cuenta:
- 1. Averiguar cuáles son las necesidades básicas: nuestras necesidades determinan nuestra forma de ver el mundo y nuestra relación con el consumo. La sostenibilidad nos invita al minimalismo.
- 2. Valorar nuestra energía y nuestro espacio vital. Tu casa forma parte de tu espacio vital. Tener solamente aquello que necesitamos contribuye a que nuestro hogar sea un sitio más apacible y un reflejo de lo que queremos para el planeta, para los demás y para nosotros mismos.
- 3. Organizar el espacio en que vivimos. Para desprendernos de todo aquello que no necesitamos es aconsejable saber de antemano que haremos con las cosas. Podemos hacer tres apartados: para donar, para vender o para reciclar.
- 4. Ordenar por categorías. El método Konmari es eficaz porque las cosas se agrupan por categorías, empezando de lo más fácil a lo más difícil: ropa, libros y papeles, artículos de cocina, baño, aparatos eléctricos, etc. y por últimos los objetos personales o los recuerdos. Nos quedamos solo con aquello que nos resulte útil y nos haga sentir bien.
- 5. Disfrutar el resultado. Una vez terminadas las sesiones de limpieza no dejemos que entren de nuevo cosas innecesarias. Disfruta la alegría de tener un espacio acorde a tus necesidades, en el que poder desarrollar también tu parte creativa y espiritual.
La jornada fue muy participativa y amena, en ella compartimos nuestras experiencias y reflexionamos sobre la importancia que tiene una buena organización y orden de nuestro espacio y cómo repercute, no sólo en nuestra calidad de vida, sino también en nuestro entorno.