La maravillosa tarde primaveral del 4 de mayo, nos reunimos, una veintena de vecinos, para aprender y debatir sobre “migraciones y derechos humanos” con Itziar Ruiz-Giménez, profesora de Relaciones Internacionales en el Departamento de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Autónoma de Madrid.
Itziar, esplendida comunicadora, en un discurso perspicaz y claro reveló lo esencialde la «narrativa» construida desde el pensamiento hegemónico en relación a las personas que denominó «en movimiento» (migrantes, exiliados legales o ilegales, desplazados, etc.
Desde 2014 una población de dos millones ochocientas mil personas llegó a Europa. Sólo Turquía acoge a casi dos millones y medio de refugiados. Teniendo en cuenta que la población de Europa ronda los quinientos millones de personas y que España recibió en 2016 a cincuenta y dos millones de turistas: ¿acaso es cierto que Europa no tenga mayor capacidad de acogimiento?
Itziar nos sugirió una clave interpretativa. Desde hace tres décadas se ha querido avalar una noción perversa; la de que en Europa no todos los seres humanos «tienen derecho a tener derechos». Idea que acarrea un taimado interés; los que, por necesidad, desean entrar en la «Europa Fortaleza», lo harán de una manera que les despoje de sus derechos, para que así prospere un triple negocio: a) el de la seguridad, b) el de las rutas migratorias inseguras (un viaje “organizado” por las mafias desde Siria a Europa puede suponer unos 2000 euros) y c) el de la mano de obra barata en los países de destino.
Sólo un espíritu crítico y solidario podrá revertir una Europa cada vez más encerrada sobre sí misma.