Bajo el lema “Ahora toca cumplir” se celebró en Madrid el día Primero de Mayo. Este año ha sido una fiesta singular debido a la pandemia COVID 19, que se desarrolló bajo grandes medidas de seguridad: aforo de 1.000 participantes, dos metros de seguridad entre los mismos y uso de mascarilla.
Transcurrió la manifestación desde la plaza de Cibeles hasta la Puerta del Sol. Los ciudadanos portaban pancartas de UGT, CCOO y otras en las que se podía leer “Ayuso: abuso” , “Ningún voto trabajador para la extrema derecha”, y varias aludiendo a la precariedad laboral y diversas reivindicaciones.
Frente de la marcha iban los principales líderes sindicales, junto a tres candidatos a la presidencia de la Comunidad de Madrid: Mónica García, Ángel Gabilondo y Pablo Iglesias. Detrás, la ministra de trabajo, Yolanda Díaz y otros miembros del ejecutivo: Ione Belarra, Carmen Calvo, Irene Montero y José Luis Ábalos. La manifestación realizó el recorrido con bastante rapidez.
Intervinieron después los líderes de UGT, Pepe Álvarez y de CCOO Unai Sordo, que mencionaron el trágico y reivindicativo origen de esta fiesta que, con el paso del tiempo, se ha convertido en el día internacional de los trabajadores y que se celebra en casi todos los países del mundo.
Después exigieron la derogación de la reforma laboral, pidieron la subida del salario mínimo interprofesional, la recuperación de la negociación colectiva y el control de los ERES.
Se clausuró el acto con la consabida marcha de la Internacional cantada por todos los presentes.