El domingo 13 de marzo, a las 12 horas de la mañana, se concentró frente al número 18 de la calle José Calvo, del distrito madrileño de Tetuán, un nutrido grupo de vecinas y vecinos, protestando por la instalación de cocinas industriales en una casa de la vecindad.
Se pudo ver como de un pequeño patio salía una gran chimenea, donde se percibía un olor nauseabundo de comida, difícil de reconocer su origen.
Los concentrados, afectados por las cocinas fantasmas, Plataforma de Madrid, llevaron a cabo una larga pitada y cacerolada, a la vez que coreaban: “fuera cocinas de nuestros barrios” y “que se las lleven a Cibeles”.
Presidía el acto una gran pancarta que rezaba; “No a las cocinas fantasmas en zonas residenciales”.
Los presentes no solo eran vecinos del barrio, allí se encontraban, de modo solidario, otros procedentes de Prosperidad, Paseo Imperial y otros lugares de Madrid en los que se está dando el mismo fraude: instalación de esas cocinas que, de modo insalubre, invaden las calles de ruido y olores, creando un ambiente nocivo para la vecindad y el barrio. Su lugar adecuado serían los polígonos industriales.
De este modo, además de las acciones legales que se están llevando a cabo reclamando una solución, se hizo patente, de modo manifiesto y público, que se está lesionando el derecho a la salud de vecinas y vecinos, por parte del Ayuntamiento de Madrid, y que no se puede seguir así por más tiempo.