Greenpeace ha hecho público su análisis pormenorizado de los programas electorales para las elecciones generales 2023, en el que valora los compromisos ambientales incluidos en los programas de PSOE, PP, SUMAR y VOX. Según la organización, la acción climática está muy presente en los programas electorales del PSOE y Sumar, poco considerada en el programa de los populares y abiertamente rechazada en el programa de la ultraderecha.
Según Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace España “aunque la lucha frente a la emergencia climática debería ser prioritaria para cualquier alianza aspirante a gobernar un país, la realidad nos muestra que el bloque de izquierdas avanzará en la lucha contra el cambio climático, y el de derechas, con VOX en el gobierno, nos conduce al colapso”,
La mitad de la superficie del Estado español es forestal. Los bosques, plantaciones, matorrales y pastizales ocupan el 56% de la superficie total del suelo, aproximadamente 27,6 millones de hectáreas. Nuestro país ocupa el tercer lugar, tras Suecia y Finlandia, en superficie arbolada y lidera la lista dentro de la ecorregión mediterránea en cuanto a superficie forestal. Tras una revisión exhaustiva de los programas electorales, Greenpeace España alerta de que las propuestas negacionistas o tibias ante el problema del cambio climático y la pérdida de biodiversidad, como las de Vox y PP, impiden hacer un correcto diagnóstico de los retos a los que se enfrenta esta gran superficie y, por tanto, acertar con las soluciones.
“Es realmente preocupante que algunos partidos políticos como Vox y PP nieguen o minimicen el papel que la actual crisis climática juega en el incremento de los grandes in cendios forestales. En sus programas, aunque mencionan la gestión forestal, no detallan cómo la harán ni prevén un incremento de presupuestos para el sector forestal o la prevención de incendios. Con estas propuestas difícilmente se pueden conseguir los consensos necesarios entre el Gobierno del Estado y las CC.AA. a la hora de abordar la necesidad de gestionar nuestros paisajes forestales de cara a la prevención y gestión de incendios desastrosos como los que vivimos en el verano de 2022 y en lo que va de 2023”, ha declarado Miguel Ángel Soto, portavoz de la Campaña de Bosques de Greenpeace España.
El año 2023 está siendo un año atípico en cuanto a grandes incendios forestales (GIF), aquellos que superan las 500 hectáreas, porque se han contabilizado ya a principios de la época estival 15 de estos grandes fuegos, frente a los 12 de 2022.
Según datos del MITERD (1), hasta el pasado 9 de julio se habían producido en el territorio español un total de 5007 siniestros, con 59.568 hectáreas de superficie forestal afectada y 15 grandes incendios forestales (al que habría que sumar ahora el actual de la Isla de la Palma). Este dato es un 42 % superior a la superficie media quemada en los últimos 10 años, pero inferior a la superficie afectada en 2022 por estas fechas, 73.269 hectáreas.
El pasado año 2022 fue el peor de los últimos 28 años, con 57 grandes incendios forestales. Estos enormes y virulentos fuegos fueron responsables de más del 80 % de la superficie quemada.
El calentamiento global agrava la evolución de los incendios forestales hacia fenómenos más peligrosos, rápidos e incontrolables, con un comportamiento diferenciado. Además, esta situación supone un sobre esfuerzo de los operativos en extinción que supone una amenaza para el conjunto del Sistema Nacional de Protección Civil. Urge una estrategia que combine el desarrollo rural y la lucha contra la emergencia climática, y una apuesta firme de defensa de nuestra naturaleza.