Los vecinos del barrio madrileño de Carabanchel se concentraron este viernes frente al centro de salud de Abrantes para denunciar que no tiene ni médico ni pediatra por las tardes y el centro solo dispone de un 40% de los médicos necesarios. Antes esto la Comunidad de Madrid y la Delegación de Gobierno enviaron a una docena de policías nacionales y Guardias Civiles. ¡Basta de represión a quienes se movilizan por la sanidad pública!. Leer mas…
Edurne Prado